Me levanté tarde, anoche olvidé sacar la carne, tengo un millón de pendientes anotados y otros que aun ni anoto.
Y justo a eso de las 11.30 a.m. (vía face) una amiga me pregunta: y tu ¿cómo estás?... inmediatamente vino a mi la palabra "cansada", pero no es una queja es un estado real. Nada más.
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Cuando estaba de novia, mi esposo y yo pensábamos tener cinco hijos, nos casamos con esa idea, y construimos una casa grande para formar una familia grande y feliz. Este finde cumpliremos 6 años de casados y tenemos 4 hijos... qué!! los números no cuadran!? bueno los dos primeros son mellizos: Carlos y Mariano, luego Dios nos regaló a Santiago y este año hace ya casi año y medio llegó mi princesa Rosita.
Mi casa es un "caos", si es verdad y tampoco es una queja, es una palabra que describe un poco como está mi casa, ordeno las habitaciones apenas se van al jardín, y se mantienen bien hasta la noche, pero la sala, el cuarto de juegos y los baños son muy difíciles de mantener ordenados y limpios, ni hablar de las paredes, no solo tienen las obras de arte de Santi, sino también sus deditos, y no tuvimos la precaución de poner pintura lavable (ese es uno de mis pendientes), así que no se ve muy bien. Ni hablar de mi pelo y mis uñas, manicure, qué es eso? (pero eso lo dejamos para otro post)
Los chicos se van al jardín temprano, así que en la mañana ordeno y cocino, los espero con el almuerzo, generalmente hacen siesta, nunca nunca los cuatro al mismo tiempo, y si por ahí se da, me pasa como hoy que me suena el teléfono, luego de la cena los baño y mi esposo lleva a dormir a los varones y yo hago dormir a mi gordita, suena fácil verdad, solo que a veces la comida no está a tiempo, o a veces tengo que arriarlos para bañarlos, luego convencerlos para que salgan del baño, vestirlos o mirar como se visten, claro cuando se visten solos es el doble de tiempo o más, además practicar a atarse solos las zapatillas, cepillar dientes, preparar las mochilas... en fin, a veces es agotador, y cuando salen por la puerta rumbo al jardín me dan un beso cada uno a Mariano, el mayor, le gusta innovar así que sus besos siempre son en algún lugar original tipo un codo, Santiago me da besos de acuerdo a su humor y apuro, a veces volados con la mano, a veces con la máscara del hombre araña puesta y Carlitos él si viene y me da un besote sonoro en la mejilla.
Pero claro mientras hice todo eso, también atiendo a mi princesa, es buenita si está papi él la tiene upa mientras trabaja, sino llora un poco y resonga, pero se va haciendo al ritmo de la casa y entiende que debe esperar.
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Luego de pensar esta mañana como estoy de cansada, recordé que el domingo cuando me levanté de la cama estaba cansada porque dormí incómoda, pues esa mañana en mi cama éramos seis, no se como hacemos para acomodarnos todos, pensé inmediatamente que somos como un tetris, acomodándonos en la cama para dormir o para compartir y remolonear una mañana fría de domingo, y sí, el caos y el cansancio valen la pena.
